Las emociones salen de lo profundo de nuestro ser.
Publicado por Patricio Varsariah el martes, septiembre 10, 2024
El manejo de las emociones, la creación voluntaria de emociones positivas viene del darse cuenta, viene de un auto conocimiento y viene de la voluntad profunda de cambiar. Y la voluntad profunda de cambiar, no se compra en las farmacias. Tenemos que trabajar en esto constantemente, y tenemos que decirnos cada vez: voy a resolver la realidad interna mía.
Vivir una vida plena tiene que ver con cual es el estado de nuestra mente. Según lo que estamos viviendo así son nuestros sentimientos y la energía que generamos. Las circunstancias nos hacen sentir mejor o peor, esa es la lógica humana, pero la lógica espiritual es distinta. Una cosa es lo que sucede fuera y otra cosa es lo que tú creas en tu interior. En realidad, es un cambio de paradigma, cambiamos de ser víctimas a ser responsables.
Una vida plena tiene que ver con que tú seas consciente de que eres el creador, lo que ocurre es que tenemos el hábito de reaccionar de forma involuntaria. La situación, la otra persona te lanza un estímulo y tú permites que explote la emoción, y entonces surge esa reacción descontrolada.
Hay un margen, mínimo, para que hagamos algo, tenemos que dar a la mente una perspectiva nueva y decidir si nos interesa esa emoción o no. Las emociones no nos interesan, aunque vivimos en una sociedad que nos inspira a vivir emociones. Las emociones nos agitan por dentro, nos descentran. Debemos darnos cuenta del efecto que las emociones tienen en nuestra consciencia. Las emociones no nos permiten tomar decisiones con claridad.
Las emociones salen de lo profundo de nuestro ser, de nuestra alma, de nuestro corazón, de nuestra mente, de nuestro interior. Por lo tanto, es normal tener emociones, es positivo tener emociones. Sin embargo, el problema que tenemos con nuestras emociones es que a veces no son muy positivas. Y cabe preguntarse ¿de dónde vienen las emociones que no son positivas?
Cuando uno siente emociones positivas uno está satisfecho, ya no busca otra cosa, mientras que cuando uno siente emociones negativas uno busca otra cosa. Esta es la prueba interna de que una es natural y la otra no. ¿Es natural tener sed y tomar algo para saciarla? Y ya una vez que uno está satisfecho es natural dejar de tomar.
Hay cosas que son efímeras y hay cosas que son eternas. Las emociones más naturales son las más sanas y son positivas, por eso todos las buscamos. Las negativas son las más desagradables y son las que menos buscamos. Lo que es negativo ha sido adquirido a lo largo de las experiencias de vida. Lo que es positivo es innato. Eso implica que se tiene la capacidad de crear ambos tipos de emociones, entendiendo que lo negativo es basura y lo positivo es salud.
Entonces, para ir hacia lo positivo lo que hay que hacer es ocupar al ser en crear los pensamientos, las emociones que uno quiere, estar ocupado en tener pensamientos positivos y no tener pensamientos negativos. Es una cosa o la otra.
Las emociones son parte de nuestra vida, son nuestros sentimientos ante los sucesos externos. Se generan en nuestro interior, influyen en nuestros pensamientos y actitudes. Hay personas muy negativas, inseguras, temerosas sin causa justificada, iracundas, celosas, envidiosas...aunque sea un poquito.
Otras optimistas, activas, que van enfrentando las situaciones que la vida les pone por delante, sin sentimientos negativos ni de culpa. La calma, paciencia y perseverancia son buena compañía para vivir en serenidad.
A lo largo de la vida aprendemos a conocernos y nos damos cuenta de lo que nos hace bien y de lo que nos hace mal...Aprendemos de la sencillez, belleza y humildad de la naturaleza y la emoción va fluyendo con creatividad y calma en nuestro interior...Somos cocreadores de nuestro mundo y tenemos la posibilidad de ofrecer nuevas perspectivas y emociones positivas, que nos faciliten nuestro crecimiento interior.
Mi gratitud por leer y que tengas un día maravilloso
Patricio Varsariah.
Vive de acuerdo con tu naturaleza, NO con las expectativas de los demás.