Es importante que con frecuencia recordemos quienes somos, por lo que hoy día Intentaré escribir una especie de mi autorretrato.

Alguien me dijo hace unos días, que yo era una persona paradójica (no es la primera vez que me lo dicen), además me dijo que era una persona muy dura en ocasiones, capaz de llegar hasta el cinismo. Y saben lo gracioso de esta historia, es que la persona que se atrevió a decirme eso no tiene ni la más remota idea de cómo soy yo. Por supuesto así mismo se lo hice saber de inmediato. 

Es cierto, a veces soy muy duro y hasta cínico. Quienes verdaderamente me conocen dicen que de esa forma oculto mi verdadero yo y que lo hago por temor a mostrar todo lo bueno que hay en mí y que me hagan daño. Puede ser.

Me considero como una persona que vive en busca de lo que falta por conocer, no sé si es una definición, pero estoy siempre buscando algo, aprendiendo, conociendo, observando. Me he dado cuenta que la gente que siempre busca MÁS, somos la gente que estamos aquí, la gente que sueña, que sostiene la fe, que busca y que además encuentra y eso no es cosa fácil, la vida no es fácil sobre todo cuando hay que luchar con tanta maldad, inhumanidad para lograr un mundo mejor, más humano, más justo, pero bueno como bien se ha dicho siempre, las cosas fáciles cualquier fulano es capaz de hacerlas, pero las cosas difíciles y buenas sólo la gente extraordinaria son capaces de lograrlas.

Una vez alguien que yo quiero mucho hizo una breve descripción de mí y puso: “fuerte, autoritario, seguro, voluntarioso, mandón, inteligente, decidido, cínico, rebelde, irónico y detrás de esa coraza que todos ven está un ser que muy pocos tienen el placer de conocer, malicioso, revoltoso, romántico y muy apasionado. Cuando lo leí no me quedó de otra que proyectar a sorprenderme, porque creo que lo digo casi todo, esa es la dualidad que hay en mí.

Una vez más diré algunas cosas de mí, algunas quizás ya dichas otras no. Intento escribir una especie de autorretrato, ¿será posible? Lo intentaré. Mm… ¿cómo empezar? Trataré de ser objetivo. 

Así es como YO me veo:

La mayoría de las veces soy todo lo que la gente evita ser o tiene miedo de ser, la sinceridad es una herramienta a la que acudo con demasiada frecuencia y es la culpable de que me cataloguen como una persona antipática (aunque no me importa). 

Soy un alma solitaria (soy un lobo u OSO solitario), pero con un sentido de la lealtad hacia los amigos que quizás raya en lo "estúpido". Me considero una persona sencilla, pero con carácter duro y obstinado, aunque de corazón blando y esponjoso.

Soy terriblemente amante de la música, no hay momento que este sin ella no importa mi estado de ánimo porque hay para toda ocasión. Amante fiel de la música, pero mal bailador (en una época bailaba mucho, aunque no lo hacía muy bien, pero lo hacía porque me encanta). Me gusta beber desde un buen vino hasta una cerveza, pero con mucha medida, me gusta leer, y escribir es mi obsesión, mi adicción y mi razón de vivir, me gusta desvelarme viendo las estrellas acompañadas de la luna, disfrutar del amanecer o del ocaso y si es junto al mar me fascina más. 

Disfruto de un buen debate (con gente inteligente claro está) y una copa de vino en compañía. Soy incondicional con la gente que quiero, apasionado por la vida, impaciente, impulsivo, sensible. Medidor de mis palabras (no siempre), no me mezclo con extraños, y soy un amante de los animales. 

Si estoy enojado es aconsejable no estar cerca. Voluntarioso, siempre quiero hacerlo todo a mi forma, muy independiente, muy bueno con los niños y amante incondicional de los animales, como es mi gato Vito Corleone.

Emprendedor, perseverante, me gustan los retos, conversador, dueño de mi tiempo, abierto al conocimiento. Amante de la naturaleza. Me conmueven muchas cosas. Disfruto la soledad y la compañía a partes iguales y siempre estoy buscando una cosa y la otra.

Odio repetirme, tengo un genio terrible. No soporto la gente hipócrita, ni interesada, ni superflua, ni los que se creen por encima de los demás. No me gusta el abuso ni la injusticia. No me importa que la gente hable de mí, que digan que soy paradójico o cualquier otra cosa, me tiene sin cuidado. Detesto que me manden a callar o que entorpezcan lo que estoy haciendo. Sin faltar a la verdad, es más o menos todo lo que se me ocurre en este momento. 

Como ven, como cualquier mortal tengo defectos y virtudes, casi innumerables, pero lo que he escrito es lo que me hace ser "Yo". En fin, hay días en que soy bueno y otros muy malo, a veces encantador y otras veces insoportable, pero siempre sin dobleces, por suerte todavía me soporto... Soy como soy, eso no lo puedo cambiar ni yo ni nadie. Los que me quieren me aceptan con todos mis errores porque si no los tuviese, no sería el mismo.

Siempre leo y a veces releo los mensajes, comentarios que recibo en mi página web y en Facebook, con mucha atención y les confieso que me sorprende encontrar gente tan interesante reunida en un mismo lugar. 

Ya nos conocemos un poquito porque en cada mensaje, en cada saludo, en cada opinión todos dejamos traslucir un poco de lo que llevamos dentro. 

¡GRACIAS! Por tu tiempo para leerme.

Que tengas un día maravilloso y gracias por leer.

Patricio Varsariah.
El arte de vivir implica saber cuándo aguantar y cuándo soltar.