Bienvenidos a este humilde pero sincero espacio.
Mi pequeño sitio donde digo libremente lo que pienso y siento.
Todos tenemos obligaciones y deberes hacia nuestros semejantes. Pero parece bastante curioso que, en la sociedad neurótica moderna, las energías de los hombres se consuman en ganarse la vida y rara vez en la vida misma. Se necesita mucho coraje para que un hombre declare, con claridad y sencillez, que el propósito de la vida es disfrutarla. Hay tanto que amar y admirar en esta vida que es un acto de ingratitud no ser feliz y estar contento en esta existencia. Mis escritos están encauzados como un camino de crecimiento personal y espiritual.